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ENTRENADORES DE FUTBOL

Las botas de fútbol - 5

Las botas de fútbol - 5

Algunas consideraciones sobre las botas de fútbol:

La bota de fútbol tradicionalmente ha sido concebida como un tipo de calzado pensado para la práctica del fútbol, básicamente construido en cuero lo más duro posible, buscando firmeza y durabilidad, generalmente cortada por debajo de los tobillos y con una suela a la que van anclados los tacos. Actualmente este rudo concepto ha pasado a concebir modelos de botas donde se aplican las más sofisticadas tecnologías en todos sus niveles de construcción, aportando confort y rendimiento al jugador y existiendo una amplia gama de modelos para cada tipo de circunstancia concreta.

Destacamos la escasa información de tipo científico y riguroso, lo que nos hace mirar a los trabajos que desarrollan las propias marcas deportivas, con sus propios criterios de valoración y falta de consenso a la hora de poder comparar características entre modelos. Del mismo modo, la falta de información que le llega al usuario a la hora de adquirir un producto que, como veremos más adelante, puede variar entre más de 30 variables en función de diferentes criterios de análisis. Solamente aparece en la bibliografía los trabajos realizados por Rodano et al. (1988) cuyo estudio supone un acercamiento ergonómico al problema de estandarizar la fabricación de las botas de fútbol. Al principio, se realizaron exámenes clínicos del pie con el objetivo de definir la morfología normal. Posteriormente se realizaron análisis de las fuerzas del pie ante distintas situaciones especiales. Finalmente, se estudiaron la cinemática de varias acciones técnicas propias del juego. Los datos obtenidos se usaron para proporcionar datos con el objetivo de mejorar el rendimiento del calzado, así como para hacer diversas recomendaciones específicas para jugadores determinados y requerimientos específicos de diversas situaciones propias del juego.

Atendiendo a Hening, E. y Zulbeck, O. (Biomechanics Laboratory, University of Essen), las principales particularidades que tiene esta materia de estudio de la Biomecánica del Equipamiento deportivo en la actualidad son:

1.- Las propiedades biomecánicas del calzado de fútbol han recibido escasa atención científica hasta la actualidad

2.- Sólo recientemente, las organizaciones de jugadores y fabricantes del zapato sólo se han interesado en los conceptos modernos de diseño del calzado para fútbol

3.- La prevención de lesiones y mejora de la actuación son los factores importantes para el diseño de cualquier calzado deportivo.

Como apunte para la reflexión, señalar que un diseño incorrecto del calzado puede ser el origen de algunas lesiones que afectan especialmente a las rodillas y los tobillos. Son conocidas las lesiones que se producen cuando los tacos se quedan anclados en el terreno de juego mientras el futbolista realiza un giro, un cambio de dirección, o recibe una patada, lo que daña especialmente a los ligamentos de la rodilla.

La bota de fútbol es un tipo de calzado destinado para la práctica del Fútbol, característica por la particularidad de incluir tacos de distintos tipos en su suela en función de su uso. (características generales de la bota de fútbol (Luhtanen, 2005)).

Se ha identificado que la bota de fútbol tiene una función ergonómica (Lees & Kewley 1993), señalando estos autores que debe ser un calzado cómodo al uso y no debe ser un estorbo al jugador, así como adaptado a los requerimientos y necesidades personales del jugador.

Siguiendo a estos autores, dicha bota para la práctica del juego debe reunir las siguientes características:

1.- Rendimiento en función de las demandas del juego

2.- Proporcionar protección para el pie

3.-Permitir al pie realizar las funciones exigidas por él mismo.

Con el objetivo de conocer las demandas específicas del juego se han analizado y grabado los requerimientos físicos que ocurrían en la bota de fútbol durante los entrenamientos y los partidos. Partiendo de este análisis se han identificado los principales tipos de movimientos realizados durante el juego, así como su frecuencia de ocurrencia durante el propio juego y los entrenamientos. Estas acciones se repitieron entonces bajo condiciones del laboratorio dónde las fuerzas de la reacción del terreno fueron grabadas.

Las fuerzas ejercidas y sufridas en cada parte del pie fueron catalogadas para cada acción específica del juego, valorando el número de veces que se repetía cada acción, siendo posteriormente relacionados con problemas concretos experimentados por los jugadores.

Los roces que producían las botas sobre la piel del pie era el problema más usual y se registró en un 27% de los jugadores profesionales y en un 15% de los aficionados estudiados. La colocación de las costuras en la zona del empeine lateral delantera de la bota era la causa de este problema, coincidiendo con las principales líneas de tensión y estrés de la bota

Aumentando la fuerza que actúa sobre la bota en todas las acciones, se estimó que en un período de 90 minutos jugando o entrenando la tensión en la bota era tres veces mayor entrenando que jugando. Este estudio tiene consecuencias para determinar el tipo de bota que se usa para ambos tipos de juego.

Cuando el pie contacta con el pavimento durante una zancada amplia característica, las fuerzas de reacción del terreno se multiplican por 2.5 veces el peso corporal (Cavanagh, 1990). La bota deben de construirse en materiales diseñados para reducir el efecto de estas fuerzas, pero las marcas comerciales actualmente no se ocupan de este aspecto con la importancia que merece.

La fuerza de impacto experimentada por el jugador puede aumentar como resultado de velocidad de carrera o el tipo de caída utilizada, y serán mayores en relación con la dureza con la que se oponen a las superficies "blandas". Este hecho podría evaluarse mediante el uso de acelerómetros colocados en la zona baja de la tibia, midiendo de esta forma el promedio de desaceleración de la zancada máxima.

Esta característica se ha investigado para la carrera con botas del fútbol en comparación con las zapatillas de carrera corrientes, a una velocidad de 3.5 m/s en distintas superficies (Lees & Jones 1994). Los resultados indicaron que el principal pico de desaceleración de la zancada máxima cuando los sujetos utilizaron botas de fútbol y corrieron en hierba, era 25.6 m/s mientras que aquellos que usaron los calzado corriente y ejecutaron en el la misma superficie, era de 23.3 m/s y en superficie de hormigón era 26.5 m/s. De estos estudios se desprende que corriendo en el césped el pico de desaceleración máxima se ve significativamente reducido ante la desaceleración pero calzando botas del fútbol bien protegidas aumentó dicha la desaceleración aproximadamente 10%.

Los beneficios de una superficie más suave se perdieron al usar una bota que no tenía ninguna mediasuela de tipo "construccional". La apariencia era que las botas que incluían mediasuela en su construcción podría mejorara de manera significativa la fuerza del impacto, con los consecuentes beneficios para el rendimiento.

Los tacos son importantes para proporcionar la tracción necesaria en una variedad de superficies. Estos han evolucionado desde unos simples clavos en la suela hasta los tapones y tacos modernos de distintas longitudes, formas, materiales, disposición, etc. (Segesser & Pforringer 1989).

El grip proporcionado está en función de la profundidad de penetración de los tacos y la firmeza de la superficie. El césped muy mojado significará que los tacos cortos no penetran debajo en la superficie más firme y pueden llevar a resbalarse. Por otro lado, el césped muy duro no permitirá la buena penetración de los tacos sobre la superficie, y lleva para presionar determinadas áreas en el pie en la zona del talón o la zona anterior del pie.

Los tacos de distintas longitudes ayudan a superar algunos de estos problemas. La cantidad de grip proporcionada por una superficie es un componente importante de la calidad para el juego y se ha repartido con del punto de vista de la superficie sobre, pero las características del taco y su disposición tienen gran influencia. Se ha encontrado que la resistencia de deslizamiento se vio poco afectada por la disposición de los tacos, en cambio, se han encontrado importantes diferencias en el coeficiente de fricción de rozamiento entre los distintos tipos de tacos estudiados.

La más gran diferencia más importante entre los tacos estudiados se localizó en los coeficientes de tracción ante la torsión (Winterbottom, 1985).

La bota debe permitir distribuir la fuerza de modo que éstas no se concentren en determinadas, como por ejemplo sobre el talón, o más particularmente bajo la cabeza de los primeros metatarsos. De esta manera, se hace especialmente importante la colocación de los tacos en la suela, así como el método que se utilice a la hora de anclar dicho taco a la bota. Se ha demostrado que los tacos atornillados anchos llevan a un descenso de la temperatura del pie más aún que los atornillados de tamaño estrecho convencional, y esto conlleva el confort del pie y reduce la probabilidad de ampollas. El pie es susceptible de ser golpeado y pisado por los pies de otros jugadores, y para tal fin, el material de la bota debe tener la capacidad de poder proporcionar protección al pie sobre estos agentes. El uso de cuero se hace necesario. Todos estos métodos se han usado por los fabricantes pero no se han publicado ningún material con el suficiente rigor científico.

Los diseñadores de botas han reconocido la necesidad de adecuar la flexibilidad de la bota a la propia del pie. Esto se consigue proporcionando una serie de pliegues o yagas en la suela de la bota a lo largo de la línea transversal colocada a la altura de las cabezas metatarsianas del pie. Mientras línea de desarrollo de diseño ya está puesta en práctica, se han identificado otros factores a la hora de buscar rendimiento y confort en el golpeo del balón, es que la rigidez de la parte dorsal del pie (empeine) debe soportar fuerzas que en ocasiones superen los 1000N. Esta rigidez se ve aumentada por la presencia de un interface (bota), aunque se redujeron por la pliegue de flexión para favorecer la flexión de flexión de las falanges. Se sugirió que estos dos requerimientos eran incompatibles, y puede que los diseños de las suelas de las botas de fútbol deban ser realizadas con un mecanismo "de cierre tipo bisagra" permitiendo la flexión en una sola dirección pero una cierta rigidez en la otra. Como diseño y proyecto que es, está por desarrollar comercialmente en un futuro (Lees, A., 1993)

1 comentario

MAURICIO LOZANO -

muchas gracias estaba buscando una informacion asi de completa y gracias a ustedes la encontré